Hoy os proponemos una receta rica, sencilla, sana y económica: con lo que te ahorrarás con este conejo con garbanzos lo único que engordará será la hucha para tus vacaciones.
Ir a la recetaPorque el conejo tiene tres características que me encantan: es sano, ya que su aportación en grasa es moderado, es económico, aunque en los últimos años parece que se ha encarecido un poco, y, con poco que hagas, está delicioso.
En este caso os propongo comerlo en un guiso muy fácil de hacer y que podrás preparar en apenas 40 minutos; créeme, cuando lo pruebas, habrá merecido la pena cada minuto.
Conejo con garbanzos
Plato: Plato principal2
raciones30
minutosIngredientes
Medio conejo troceado
250 gr de garbanzos cocidos
Medio calabacín
1 pimiento verde
1 cebolleta
2 dientes de ajo
Chile fresco, picado (al gusto)
1 tomate, pelado y troceado
1 copa de oloroso
2 cucharadas de tomillo
2 cucharadas de romero
Aceite
Pimienta
Sal
Instrucciones
- Para preparar este conejo con garbanzos comenzamos salpimentando el conejo y añadiendo el tomillo y el romero. Impregnaremos bien la carne con la sal, la pimienta y las especias y doraremos ligeramente en una sartén grande con dos cucharadas de aceite caliente.
- Reservamos el conejo y, en la misma sartén, pochamos la cebolleta, bien picadita. Añadimos el pimiento verde, también picado, y, cuando empiece a ablandarse, añadimos la copita de oloroso, que dejamos reducir.
- Volvemos a introducir el conejo y añadimos el chile, el tomate y agua hasta casi cubrir. Cuando hierva, salamos al gusto, tapamos la sartén y dejamos cocer a fuego bajo durante 20-30 minutos, hasta que el conejo esté blando.
- Mientras se va cociendo, cuando falten aproximadamente 10 minutos añadimos los garbanzos previamente cocidos. Puedes cocerlos previamente, aprovechar los que te sobren de otro plato (los de un cocido estarían de traca, por ejemplo, y es una buena forma de aprovechar las sobras) o, como último recurso, comprarlos ya cocidos, aunque en esta opción recuerda lavarlos previamente bajo el grifo.
- Por otra parte, mientras se termina de hacer el guiso, corta el calabacín previamente pelado en dados y los salteas en una sartén aparte. Esto no es estrictamente necesario; puedes preparar el calabacín en el guiso pero a mí me gusta hacerlo así para que la carne del calabacín esté más consistente. Lo añades en los últimos minutos al guiso y listo.
- Para terminar este conejo con garbanzos, destapa la sartén y déjalo un par de minutos a fuego fuerte (puedes aprovechar a hacerlo cuando incorpores el calabacín salteado, por ejemplo). Ya solo te queda resistirte a la impaciencia de meter el tenedor en la sartén del conejo con garbanzos, porque huele que alimenta, y comértelo como dios manda, en un plato (y con bastante pan para untar en la salsa, claro).